La verdadera razón por la que el VAR enfurece a los aficionados al fútbol y cómo solucionarlo
Si ha visto fútbol (o fútbol) en los últimos años, sabrá que el juego se ha visto consumido por controversias sobre su nueva tecnología de arbitraje. El sistema de árbitro asistente de vídeo (VAR) se introdujo en la Premier League inglesa en 2019 para reducir los errores arbitrales y acertar más decisiones. Más bien, ha creado nuevos tipos de incertidumbre y ha socavado nuestra comprensión de reglas fundamentales como el fuera de juego y el balonmano. También ha enfurecido a los aficionados, a quienes a menudo se les puede escuchar coreando “ya no es fútbol” después de un largo control del VAR.
Es justo decir que a los aficionados al fútbol les gusta enfadarse, especialmente cuando las decisiones arbitrales van en contra de su equipo. Pero como sostengo en mi nuevo libro, No puedo dejar de pensar en el VARhay más en esto de lo que parece. Como alguien cuyo trabajo implica desarrollar nuevos métodos para medir el nivel educativo, he pensado mucho sobre las razones por las que el VAR ha sido tan frustrante. Creo que sus problemas se relacionan con el desafío de precisar la realidad objetiva, la dificultad de una medición precisa y el disgusto humano por la incertidumbre.
Sin embargo, también me he dado cuenta de que el VAR ejemplifica los límites de la racionalidad en muchos ámbitos de la vida mucho más allá del campo de fútbol. Como tal, una breve exploración de la historia de la medición de manera más amplia: desde los intentos de precisar el punto de ebullición del agua en el siglo XVIII hasta la lucha por evaluar con precisión…