The Exploration Company recauda 160 millones de dólares para construir la respuesta europea a SpaceX Dragon
Actualmente, sólo dos empresas ofrecen entrega de carga hacia y desde la Estación Espacial Internacional, y ambas tienen su sede en los Estados Unidos. The Exploration Company, que opera en Alemania, Francia e Italia, busca cambiar eso: acaba de cerrar una gran ronda de financiación para promover su misión de construir la primera cápsula espacial reutilizable de Europa.
La ronda Serie B de 160 millones de dólares financiará el desarrollo continuo de la nave espacial Nyx, que será capaz de transportar 3.000 kilogramos de carga hacia y desde la Tierra. La compañía, fundada hace tres años por los ingenieros aeroespaciales Hélène Huby, Sebastien Reichstat y Pierre Vine, tiene como objetivo realizar el vuelo inaugural de Nyx hacia y desde la ISS en 2028.
“Somos la primera empresa en el mundo en la que por primera vez la financiación proviene principalmente de inversores privados”, afirmó Huby en una entrevista reciente. Esto contrasta con la cápsula Dragon de SpaceX, que, según ella, fue “financiada principalmente por la NASA”.
La nueva financiación, liderada por Balderton Capital y Plural, eleva la financiación total de la startup hasta la fecha a más de 208 millones de dólares. La Serie B también contó con la participación de Bessemer Venture Partners, NGP Capital y dos fondos soberanos europeos, French Tech Souveraineté y DeepTech & Climate Fonds.
“Hemos podido cumplir nuestras promesas en los últimos tres años”, afirmó Huby. “Hemos podido cumplir nuestro objetivo de efectivo cada trimestre… Los inversionistas pudieron ver que básicamente podemos entregar a tiempo, en costo y en calidad”.
La startup ha ganado terreno con la Agencia Espacial Europea (ESA), que ha reconocido la necesidad de fomentar las capacidades nativas de lanzamiento y transporte espacial. A principios de este año, The Exploration Company obtuvo un contrato de estudio por valor de unos 25 millones de euros (27 millones de dólares) para desarrollar servicios de retorno de carga. Ese contrato estará vigente hasta 2026, y se espera que sigan oportunidades de contratos competitivos adicionales. El objetivo de la ESA es lanzar al menos una cápsula a la ISS en 2028.
La estructura del contrato, llamado Contrato de Servicio de Retorno de Carga LEO, se asemeja al programa de Servicios Comerciales de Transporte de Retorno Orbital de la NASA que la agencia lanzó en 2006. Ese programa resultó en contratos de transporte multimillonarios para SpaceX y Orbital Sciences Corporation (ahora Northrop Grumman).
Es un comienzo prometedor, pero igualmente prometedor es el impulso que The Exploration Company está viendo en el aspecto comercial. Alrededor del 90% de la cartera de contratos de 770 millones de dólares de la startup proviene de los desarrolladores de estaciones privadas Vast, Axiom Space y Starlab, según informes recientes.
El primer vehículo de demostración de la Compañía de Exploración se lanzó en el vuelo inaugural del Ariane 6 este verano, aunque no se desplegó debido a un problema con la etapa superior del cohete. La segunda misión de demostración a subescala, llamada Misión Posible, está programada para lanzarse en un SpaceX Falcon 9 el próximo año.
“Respeto mucho lo que SpaceX ha podido lograr”, dijo Huby. “Estamos tratando de aprender lo más posible de eso, nos inspira lo que han logrado. Pero también creemos que el mundo necesita más competencia y queremos, paso a paso, construir una alternativa. Somos muy conscientes de que llegamos tarde, que somos mucho más pequeños, etcétera, pero hay que empezar”.